Si un rojo
ajeno, mojado
invasivo, pequeño
apareciese de pronto
estrambótico, ruidoso, nacido
precipitado
en mí
Si existiera la posibilidad de
que
jus
toaho
ra
la Bola ésta
viniera a quedarse
incrustada en mi estómago
para absorber mis pesadillas y Mi
sangre
aspirarla,
desintegrar cada coágulo
Primero sería nombrarla
poder desnombrarla
y no decir
Tengo que deshacerMe
de
ella.
Eugenia Coiro, Bengala Hotel.
Viajera, 2011.