una melodía susurra
brisa en mi cara
aquella fragancia de mar
húmeda
vívida
tan suave
me salpica
con agua invisible
atraviesa
la piel
cierro mis ojos
y respiro
cada hendija de luz
respiro
otra vez
en mí
intensamente
cómo el cuerpo vibra
tanta agonía
orgasmo
respiro
late el pecho
las piernas
los labios
las lenguas
adentro
laten
entrelazándome
virgen
musa
serpiente
vampiro
mujer
sirena
Sofía Ciravegna, Sumergida.