Entrevista al autor sobre «Presente continuo»
Ahora algunas preguntas más puntuales para poder “verte” mejor a través de las palabras.¿Cómo caracterizarías a tu poética o a tu búsqueda?
Un trabajo artesanal. Me gusta la idea de escribir el poema, pero paradójicamente, a veces ese acto me produce cierto malestar. Quiero que suceda lo más rápido posible para poder rearmarlo o corregirlo. Escribo, muchas veces, para que acontezca otro momento, que tiene que ver con un par de preguntas: ¿qué hago con estas palabras? ¿cómo las organizo? ¿de qué modo se disponen en la página?
¿Qué te encanta en un texto literario y qué te repele?
Un texto tiene que afectarme en muchos planos, y sobre todo en un plano físico. No sé cómo ocurre esa cuestión, pero en mi caso tiene que ocurrir algo físico para aceptar un texto.
No me gustan los textos sentenciosos, aquellos que tienen muchos axiomas.
¿Cómo es tu relación con otras artes?
El hecho de tener un amor grande por el cine, y de tener una pequeña colección de libros de pintura tal vez se vinculen con el trabajo de la poesía. Pero no podría decirte en qué punto.
Supongo que la imagen ha gravitado en mi primera infancia; de hecho, de niño dibujaba, a tal punto, que al ver que tenía una cierta destreza de inventar, mi madre me envió a un profesor de dibujo; fui muchos años a ese lugar, pero la primera clase fue sintomática: me hizo copiar una imagen, pero no me había salido exactamente igual, y el profesor me reprendió.Recuerdo que volví a mi casa, me escondí debajo de la cama de mis padres, lloré con furia, y a partir de allí, en un sentido artístico del término, nunca más dibujé. Sin establecer una relación necesaria, lo cierto es que por ese tiempo, aproximadamente, fue cuando empecé a escribir. Paradójicamente escribía cosas que veía en la tele: El Zorro, Príncipe y Valiente, etc. Eran pequeñas novelas de 48 páginas, coincidentes con el número de páginas de los cuadernos, que “copiaba” de la televisión. Acaso esa escritura fue como una extensión de la imagen.
¿Cómo sería tu lector ideal?
No pienso en un lector ideal; cada uno se ve afectado o no por los poemas y los lee de acuerdo a su gustos e intereses.
¿Por qué Presente Continuo?
Es el nombre de un poema dedicado a mi amigo Raúl Egitto. En el título del libro tiene un sentido positivo, aunque en el poema me parece que cambia ese sentido. El pasado puede ctualizarse en el presente y transfigurarse; lo más querido y lo más doloroso del pasado puede formar parte de un continuum con el cual moverse, con el cual hacer cosas. Hacer algo con esos días, con esa experiencia y hacer de la intemperie un presente posible. La poesía es una forma de hacerse cargo del tiempo.